El Hotel Hacienda de Abajo colabora en la campaña para poder publicar el nuevo número de Rincones del Atlántico

El hotel Hacienda de Abajo de Tazacorte, en la isla de La Palma, colabora como copatrocinador en la campaña de crowdfunding que estamos llevando a cabo para poder publicar el nuevo número de Rincones del Atlántico dedicado a la arquitectura tradicional de Canarias: «Arquitectura y Paisaje. La arquitectura tradicional en el medio rural de Canarias. Tomo II». Agradecemos a sus propietarios: Luis Ignacio López de Ayala y Enrique Luis Larroque su apoyo y colaboración.

Hotel Hacienda de Abajo

Situado en pleno centro histórico de Tazacorte, en la isla de San Miguel de La Palma, en el corazón de la más importante zona agrícola de Canarias, el Hotel Hacienda de Abajo es el resultado de la cuidadosa rehabilitación de una antigua hacienda azucarera del siglo XVII y el primer hotel allí construido, cuya singularidad ha sido reconocida oficialmente a través de su clasificación como hotel emblemático – el primero de Canarias -, modalidad que el Gobierno de Canarias reserva únicamente a aquellos hoteles cuya edificación constituye un bien inmueble integrante del patrimonio histórico de la Comunidad autónoma de Canaria

En un entorno caracterizado por una exuberante y rica vegetación, una costa que domina un océano de aguas puras e intensamente azules y un clima soleado y cálido con noches profusamente estrelladas, se yergue un conjunto de construcciones que fueron la residencia de los protagonistas de una rica tradición de intercambios comerciales con Flandes, Andalucía y las Indias Occidentales, y que hoy, con sus valiosas colecciones artísticas y espléndido jardín de rarezas botánicas, dan la más entusiasta bienvenida al viajero que desde siempre siente la cálida acogida de un pueblo y de una familia que son el fruto de la unión de distintas naciones y culturas.

La Casa Principal de Tazacorte, como también se denomina el edificio principal del Hotel Hacienda de Abajo, ha sido, desde su construcción en el siglo XVII hasta hoy, propiedad de la Casa de Sotomayor Topete, familia noble procedente de Galicia, posteriormente afincada en Extremadura y Andalucía, desde donde pasa a Canarias en los primeros años del siglo XVII, ostentando asimismo, por alianzas matrimoniales, los señoríos de Lilloot, Berendrech y Zuitland en los Estados de Flandes, señoríos cuyo origen se remonta a la Edad Media, siendo gobernados desde La Palma hasta finales del siglo XVIII en una expresión más del multiculturalismo de una dinámica y culta sociedad integrada por personas de variada procedencia que mantuvieron un contacto permanente con sus lugares de origen

Historia

Fue en Tazacorte donde en 1492 desembarcaron los conquistadores castellanos y donde, tras la conquista de la isla de San Miguel de La Palma en Canarias, finalizada en 1493, se establecieron los primeros asentamientos en el Valle de Aridane, ya que allí se hallaban las tierras más fértiles, el llamado río de Tazacorte o de La Caldera, único curso de agua corriente de la zona, y una costa que permitía una fácil comunicación con el exterior.

Pronto la caña de azúcar se convirtió en el cultivo principal de la Hacienda de Abajo, así denominada desde el siglo XVI y situada en Tazacorte, que constituye la primera y más antigua hacienda azucarera de La Palma y también la más rica y productiva, tal y como lo pone de manifiesto el profesor de la Universidad de La Laguna don Jesús Pérez Morera en un magnífico trabajo de investigación sobre la misma.

En Tazacorte, la hacienda construida por don Jácome de Monteverde (último dueño unipersonal de la Hacienda de Abajo o de Tazacorte hasta su muerte en 1531) y ampliada por sus herederos era un verdadero conjunto urbano residencial e industrial con una zona residencial central donde se situaban, además de otras construcciones, las casas de los señores, que tenían su entrada principal hacia el naciente y un gran balcón-mirador en sus fachadas traseras hacia el poniente con grandes vistas hacia el mar, los cañaverales y el ingenio.

Fue don Pedro José de Sotomayor Topete Massieu Vandale (1689-1750), quien, durante su matrimonio con doña Catalina Cecilia de Sotomayor Topete y Alzola, edificó sobre parte del solar que ocupaba la antigua casa grande de purgar azúcares de la hacienda, la denominada Casa Principal de Tazacorte, vivienda agregada al vínculo que fundó esta señora a favor de su hijo segundo don Nicolás José de Sotomayor Topete Massieu Vandale (1737-1814) y, que, tras el fallecimiento del último poseedor de dicha vinculación, don Miguel Pedro de Sotomayor Topete Fierro y Massieu Salgado (1782-1851), ha continuado siendo propiedad de sus descendientes.

Esta casa de planta rectangular, vivienda de alto y bajo, dos cubiertas de teja árabe a cuatro aguas, muro de cerca y una excepcional estufa para secar cochinilla, presenta, como las demás viviendas señoriales de la antigua hacienda, un balcón-corredor techado de madera de tea (corazón del pino canario) en su fachada abierta hacia poniente, mientras que desde su fachada opuesta se podía contemplar la huerta de la hacienda. Rodeada por un muro, esta última se extendía desde detrás de esta casa hasta la actual Casa Massieu y en ella, además de hortalizas, se plantaron árboles (higueras, naranjeros, limoneros, membrilleros, morales, etc.) y «platanales», cuya existencia en esta finca consta, y también por primera vez en La Palma, en la Partición Grande o de Vandale de 1613.

El Hotel: Sus edificios

El Hotel Hacienda de Abajo, primer hotel que se construye en Tazacorte, consta de cuatro edificaciones distribuidas alrededor de un jardín interior, donde antiguamente se ubicó la huerta de la hacienda, y dentro de un recinto amurallado al que se accede a través de magníficas portadas con antiguas puertas de madera de dos hojas.

Situada en el centro histórico de Tazacorte, la antigua Casa Principal de Tazacorte, bien inmueble integrante del patrimonio histórico de la Comunidad Autónoma de Canarias, ha sido objeto en los años 2010 y 2011 de una cuidadosa rehabilitación a cargo de la arquitecta doña María del Carmen Alemañ García que, tras la supresión de añadidos arquitectónicos del siglo XX que desvirtuaban su fachada, le ha permitido recobrar su apariencia original. A la misma se le ha añadido un cuerpo de dos plantas de balcones cubiertos, abiertos y cerrados, con antepechos cerrados sostenidos por pies derechos, cubiertas de teja árabe a cuatro aguas u horizontales, y dos torreones, central y en esquina, que, con magnífica visión del mar y los cultivos, destacan el carácter señorial y casi militar de casa-torre de las antiguas residencias de los señores de la Hacienda de Abajo. Ello responde a una práctica muy frecuente en la arquitectura tradicional canaria, en consonancia con las necesidades que se van presentando, como es añadir a la edificación primitiva, normalmente dispuesta en forma lineal y de superficie reducida, cuerpos que hacen que tal disposición lineal acabe en forma de L o de U.

Al mismo tiempo, las edificaciones de nueva construcción que rodean la casa respetan escrupulosamente la disposición original de la hacienda azucarera y la tipología edificatoria de la zona, donde la arquitectura doméstica se integra armoniosamente en un paisaje donde el predominio de la caña de azúcar fue sustituido, desde finales del siglo XIX, por un cultivo, como es el del plátano, también exótico y exuberante, y que hoy cubre como un gran manto verde el Valle de Aridane.

En el caso de estas últimas edificaciones, una de ellas constituye una vivienda de alto y bajo con cubiertas de teja árabe y balcones abiertos con tejados y antepechos cerrados sostenidos por pies derechos y jabalcones de madera, mientras que las otras dos son edificaciones de una sola planta con cubiertas de teja árabe a cuatro aguas que alojan, una, un pequeño oratorio que recrea las ermitas tan características de las antiguas haciendas, como la de San Miguel de Tazacorte, y, otra, “una lujosa casa de baños”, por emplear la definición que el viajero británico decimonónico Charles Edwardes aplicó a la edificación que construyó en el siglo XIX don Miguel de Sotomayor y Fernández de la Peña, llevado por el espíritu romántico de la época, en sus jardines de la Casa Sotomayor Massieu de Argual.

Tanto las puertas como las ventanas de guillotina utilizadas en las fachadas e interiores de estas edificaciones son, en muy buena medida, ejemplares antiguos de los siglos XVII, XVIII y XIX salvados de la destrucción o del abandono para su posterior empleo en el Hotel Hacienda de Abajo, merced a una política de adquisiciones llevada a cabo a lo largo de los últimos años, y representan la mejor colección de puertas y ventanas antiguas formada en Canarias en los últimos años. Ello refleja además una práctica muy habitual en la arquitectura tradicional canaria, como fue la reutilización de maderas, sillares y piedras de edificios derruidos para emplearlos en edificaciones de nueva construcción. Una muestra más de una arquitectura sostenible respetuosa con un entorno en el que se integra y que conoce el valor de unos recursos naturales escasos y por ello valiosos.

Localización

El Hotel Hacienda de Abajo se encuentra situado en la calle Miguel de Unamuno, n.º 11, de la Villa y Puerto de Tazacorte, municipio que, con 5.559 habitantes en 2011 y 11,36 km², se halla en el oeste de la isla atlántica de San Miguel de La Palma, en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias.

Contacto: http://www.hotelhaciendadeabajo.com/es/apartados/contacto

facebook: https://www.facebook.com/HotelHaciendaDeAbajo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Puedes usar las siguientes etiquetas HTML y atributos:

<a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>